Biblioteca Permeke

La biblioteca como punto de encuentro cultural necesita paisajes sonoros controlados

La Biblioteca Permeke no es un edificio bibliotecario al uso. No sólo alberga la biblioteca pública de Amberes, sino que también es un lugar de encuentro cultural para los jóvenes y mayores de la ciudad. Alberga numerosas actividades y atrae a muchos visitantes para que vengan a disfrutar de la biblioteca, lo que requiere una solución acústica de gran tamaño. 

La ciudad de Amberes combina grandes valores con la función pública de las bibliotecas. No sólo para los estudiantes, sino para todos los habitantes de la ciudad. Además de la amplia colección de literatura que abarca libros, música, películas, cómics, mangas y novelas gráficas en varios idiomas, el local de Permeke también ofrece todo tipo de actividades culturales.

Diferentes zonas para una mejor experiencia acústica

Cuando los visitantes entren en la biblioteca, vivirán una experiencia excepcional. La biblioteca está dividida en diferentes zonas para crear una experiencia óptima para los distintos tipos de visitantes. Las salas de abajo son para el entretenimiento y la colaboración, donde los grupos pueden venir, trabajar juntos y unirse a actividades como horas de lectura, clubes de lectura y talleres. 

En el auditorio, los visitantes pueden desplegar su lado creativo y disfrutar de películas, teatro, conferencias, conciertos y exposiciones cambiantes. La planta superior es la zona tranquila, y ofrece espacios silenciosos para el estudio, la lectura y el trabajo. La gran colección de literatura y obras de referencia de esta planta es un verdadero paraíso de la lectura. En la ciudad donde viven más de 180 nacionalidades, la biblioteca ofrece todo un sector con libros en diferentes idiomas. Es más que una biblioteca, es una plataforma para disfrutar de la tranquilidad en un bonito entorno.

Las mejoras acústicas crean agradables paisajes sonoros

La biblioteca se inauguró en 2005, pero el personal se quejaba del mal ambiente sonoro en el que se sentían estresados e incómodos. La ciudad de Amberes realizó una medición que demostró que los valores no cumplían las normas nacionales sobre tiempos de reverberación. 

Se buscó una solución para mejorar la acústica, pero era importante que no desvirtuara la característica estructura de vigas ni el sistema de refrigeración nocturna de la instalación. La solución debía mantener la apertura del espacio, por lo que finalmente se instalaron más de 1.300 bafles Rockfon® Universal™ en dos tamaños diferentes (1200x300 y 1800x300 mm) en los colores Rockfon Color-all® Stone y Hemp.

La elección de los bafles dio a la biblioteca una apariencia industrial especial al edificio, mientras que los visitantes podían disfrutar de su visita a la biblioteca en paz.