El impacto del sonido en la oficina
La acústica de las oficinas puede ser todo un reto. Y con el personal regresando al trabajo a medida que la pandemia de Covid-19 se contiene, sube el volumen de videoconferencias en lugar de reuniones presenciales, lo que aumenta el ruido. Algunos espacios de oficinas necesitan desarrollar mucha actividad y muchas conversaciones, otros necesitan privacidad para fomentar la concentración, y todavía hay otros que necesitan generar una sensación de relajación y acogimiento. Así que, ¿puedes equilibrar la acústica de tu oficina para crear un espacio de trabajo saludable y confortable donde la gente quiera trabajar?
Cómo afecta el ruido a la salud y la productividad
Cuando se diseña un espacio de oficina, los niveles de ruido merecen siempre consideración especial, porque no serán nada fáciles de corregir una vez que se haya terminado la construcción. En un reciente informe de Leesman, el 74,6 % de los encuestados nombró los niveles de ruido como uno de los factores físicos más determinantes de un espacio de trabajo efectivo. Las oficina ruidosas se consideraron como las menos satisfactorias de todas, y menos de una tercera parte de los empleados se sintió satisfecha con la acústica actual de su oficina.
Los ruidos no son solo molestos, sino que también son perjudiciales para nuestra salud. La distracción en la oficina tiene un impacto directo en los niveles de estrés, la cantidad de días de baja, las tasas de rotación de los empleados e incluso en la velocidad y la precisión con la que se realiza una tarea.
En el caso de oficinas abiertas, las estadísticas son todavía peores. Los empleados que trabajan en oficinas abiertas son un 15 % menos productivos, y tienen más dificultades a la hora de concentrarse, llegando a perder hasta 20 minutos diarios de concentración durante el trabajo.
¿Cómo puede la acústica ayudar a que más personas deseen trabajar en tu oficina?
El acondicionamiento acústico puede transformar una oficina por completo. Según los análisis realizados por el Dr David Sykes, la implementación de la acústica en una oficina abierta crea: